martes, 4 de octubre de 2011

VELAS, ENCENDIDO Y APAGADO

Lo ideal es que la vela se encienda o con una cerilla de madera, que es un elemento natural, o con otra vela encendida con anterioridad. La vela debe encenderse siempre con la mano dominante en la persona, ya sea zurda o diestra, mientras que lo recomendable para encender una vela con otra es usar ambas manos.

El apagado o extinsión de la vela, es también un aspecto muy importante a tener en cuenta. Por norma general, la vela se deja consumir hasta el final, hasta que ella misma se apaga. Sin, embargo, cuando se desea alterar este proceso y el apagado es voluntario, el mejor sistema es apagar la llama utilizando un apagavelas. De esta forma, toda la energía que hemos proyectado a la vela, no se perderá en un soplido de aire.
Prender velas para obtener favores o dar gracias por las Bendiciones Recibidas, ha sido parte de una u otra manera. En los archivos antiguos se encuentran datos de que los campesinos griegos usaban velas amarillas para garantizar salud y longevidad y, los romanos encendían velas naranjas en su casa para obtener beneficios de la nobleza del lugar. En todas partes del mundo existen tradiciones que persisten a través del tiempo sin saber de dónde provienen.